16 Enero 2017 - 8:45pm
Salud

Descubre como mejorar tu Lonchera en tiempos de crisis

En momentos de difícil acceso a los productos a los que estamos acostumbrados a consumir, se hace esencial conocer nuevas propuestas nutritivas que satisfagan las necesidades de nuestro cuerpo para estar y sentirnos bien

Como bien dice un dicho, la necesidad agudiza la creatividad y el entendimiento. En momento de crisis lo mejor es volver a lo esencial, a los alimentos sanos que nos proporcionan todo lo que necesitamos y, además, a ser un poco más creativos a la hora de elegir y combinar toda la gama de nutrientes que tienen los vegetales, granos, proteínas y cereales para absorber lo mejor de ellos para nuestro bienestar.

En apoyo a opciones  que permitan mejorar su calidad de vida, la  Fundación Seguros Venezuela y la Gerencia de Recursos Humanos de la empresa, realizan un acompañamiento con su personal, ofreciéndoles información que les permita mejorar sus hábitos alimenticios. En este sentido, invitaron a Judith Nyisztor, especialista en nutrición deportiva, quien ofreció una charla de Nutrifit, dirigida a los empleados de Seguros Venezuela, señalando que este tipo de iniciativas es brindar herramientas prácticas que puedan utilizar en su día a día, para garantizar que las personas se estén nutriendo de una manera adecuada, dada la dificultad de acceder a productos que son parte de la cesta básica de los venezolanos.

“Hay  desinformación y muchos mitos en todas las redes, entonces encontramos en estas charlas una oportunidad para darles una información real, oportuna y veraz en voces expertas, trayendo al ruedo una serie de recomendaciones prácticas que les van a garantizar una buena nutrición”, recalcó Nyisztor.

El balance ideal

La buena alimentación depende de saber el valor nutritivo y la función de los alimentos. De acuerdo con la especialista, tanto las proteínas, como los vegetales, cereales y carbohidratos son sumamente importantes para que nuestro cuerpo se desempeñe de manera adecuada y la idea es saber cómo combinarlos para obtener lo mejor de cada uno.

“Los plátanos y los tubérculos, el ñame, la papa, son carbohidratos muy importantes y no deben ser retirados de nuestro consumo porque nos brindan vitaminas de complejo B y algunos minerales como el hierro, el fósforo, el magnesio y, sobretodo la fibra, que proviene de todos los productos integrales. Para enriquecer, por ejemplo, una apera, podemos colocarle avena, linaza, zanahoria o remolacha, que nos permite agregarle esa fibra que necesitamos diariamente, más que todo en las mañana para darle una buena funcionalidad a nuestro aparato digestivo”, recomendó Nyisztor.

En cuanto a las proteínas, es importante tomar en cuenta que son todos aquellos alimentos que nos ayudan a la restauración y reparación de nuestros músculos y tejidos, proporcionando la energía requerida.

La magister en nutrición explicó que éstas deben ser de excelente calidad porque hay diferencia en el valor proteico en cada uno y están encargados de brindarnos vitaminas y minerales como el calcio, el hierro, la vitamina A,  D, B1 y B12, las cuales se encuentran presentes en la leche y el yogurt,  que son buenas opciones para las dos meriendas que se recomiendan diariamente. De igual manera, los vegetales y las frutas son esenciales para una buena alimentación. “La idea es saber combinar los alimentos, si tu llevas caraotas, arroz y vegetales en tu vianda, ya tienes lo que necesitas para esa comida principal”.

Entre otras recomendaciones, la especialista recalcó la importancia de tener cinco comidas diarias que incluya tres platos principales y dos meriendas, una a media mañana y otra en la tarde, para evitar esa desproporcionalidad que existe cuando no se hace la ingesta calórica equilibrada. Además agregó algunos tips que pueden mejorar la conservación de los alimentos para obtener los nutrientes esenciales.        

“Lo más recomendable, es utilizar recipientes plásticos para refrigerarlos y colocarles fecha de envasado para saber hasta qué fecha se pueden consumir, que no debe ser más de 3 meses si son vegetales, y si se trata de proteínas deben ser consumidas antes de los 12 meses de refrigeración”, concluyó Nyisztor.